Utilización del Cliente iFolder

Tras instalar el Cliente iFolder, cada vez que se reinicia el computador se inicia una sesión del Cliente iFolder y aparece un icono de iFolder en la bandeja del sistema. Entre cuando desee que iFolder sincronice los archivos.

Acceda al directorio local de iFolder y a los archivos normalmente mediante el navegador de directorios. Si ha decidido crear un acceso directo en el escritorio, cuando haga doble clic sobre el mismo se desplazará al directorio local de iFolder directamente. También puede hacer clic con el botón derecho del ratón en el icono de iFolder en la bandeja del sistema, seleccionar Abrir iFolder y acceder al directorio local de iFolder.

La sesión del Cliente iFolder se ejecuta en segundo plano mientras trabaja con los archivos locales y lleva a cabo el registro y seguimiento de los cambios efectuados en los archivos del directorio local de iFolder. Active la conexión a Internet y entre en el servidor iFolder para activar el proceso de sincronización. iFolder carga y descarga los archivos personales de forma instantánea y segura. Puede permanecer conectado para que se efectúe una sincronización continua o bien iniciar una sesión periódicamente, según cuáles sean los requisitos de su entorno de trabajo.

El servidor iFolder realiza una copia de seguridad de los archivos locales y permite sincronizarlos entre varias estaciones de trabajo. Los archivos están siempre protegidos en la red y se pueden recuperar fácilmente en caso de pérdida de los datos locales. Si se traslada a otra ubicación y a una estación de trabajo distinta e inicia sesión en el servidor iFolder, el Cliente iFolder actualiza automáticamente el directorio local de iFolder para reflejar el trabajo realizado desde cualquier otro computador, sin necesidad de utilizar disquetes ni realizar transferencias manuales de archivos.